Estimados, 


Hemos identificado que algunas implementaciones en entornos on-premise no siguen las mejores prácticas de seguridad, lo que ha generado inconvenientes tras la actualización de TLS. Entre los principales problemas detectados se encuentran:


  1. Sistemas operativos desactualizados: Falta de parches de seguridad y service packs esenciales.
  2. Uso de ERPs sin soporte: Plataformas que operan en sistemas cuyo mantenimiento por parte del fabricante ha finalizado.
  3. Desarrollos con protocolos de seguridad insuficientes: Aplicaciones que no cumplen con los estándares mínimos requeridos.


Para garantizar la seguridad y estabilidad de los sistemas, es fundamental abordar estas vulnerabilidades de manera proactiva. Recomendamos revisar y actualizar las configuraciones de sus infraestructuras tecnológicas para alinearlas con las mejores prácticas de seguridad.